Le Concert d’Astrée volvió al Palau de la Música Catalana con BCN Clàssics, ofreciendo un programa barroco lleno de energía bajo la dirección de Emmanuelle Haïm. El concierto comenzó con el Concierto a cuatro para cuerdas de Durante, un inicio vibrante que dio paso a los Salve Regina de Scarlatti Leo, donde Carlo Vistoli y Emőke Baráth cautivaron al público con unas voces llenas de sensibilidad.

En la segunda parte, la Sinfonía fúnebre de Locatelli preparó el ambiente para un Stabat Mater de Pergolesi que emocionó a todos, con una gran complicidad entre los solistas. Haïm cerró la velada con dos bises de Händel: Dolci chiodi” de La Resurrezione y “Who calls my parting soul from death” de Esther, que entusiasmaron al público.

Orquesta, directora y solistas mostraron una química admirable, fruto de una intensa gira que ya los ha llevado por varias ciudades francesas y que continuará en Oviedo y Madrid.