Patricia Kopatchinskaja se convirtió anoche en Pierrot Lunaire para celebrar el centenario de esta obra clave del modernismo.
Justo el día en que se cumplían 100 años del estreno en España, BCN Clàssics y el Palau de la Música Catalana rindieron homenaje a Arnold Schönberg, un compositor que amó y aportó mucho a la ciudad de Barcelona.
Basada en 21 poemas de Albert Giraud, cuya letra el público pudo seguir en mano gracias a una réplica del programa original de 1925, Patricia Kopatchinskaja y cinco músicos más dieron vida a esta alocada e inesperada obra de un genio adelantado a su tiempo.
Con una presentación previa del compositor Joan Magrané, experto en Schönberg, la Sinfonía de cámara núm. 1 del mismo, completó el programa.